Un vistazo a la antigua Monza, la Monza medieval.
Los restos arqueológicos, descubiertos durante la construcción del nuevo Palacio de Justicia en la zona comprendida entre via De Amicis, via Bellani y via Solera, forman parte de la extensión de la antigua aldea medieval, donde se encontraba el orfanato femenino que lleva el nombre de Angelo Bellani.
Desde el siglo XIII, esta zona de la ciudad pudo contar con la presencia de numerosos edificios con funciones residenciales, entre ellos algunas de las domus umiliate más famosas de Monza, y religiosas. Este último perteneciente al antiguo oratorio de Sant'Agata y no lejos del Lambro.
Las investigaciones arqueológicas, que también pueden contar con un plano de la zona que data de 1722 (el más antiguo encontrado hasta ahora), han revelado un contexto articulado formado por varias habitaciones interconectadas.
Estas conexiones sugieren que hubo tres fases constructivas cronológicamente próximas.
El cuerpo del edificio se divide en al menos tres estancias de sótano y una serie de estructuras de servicio, anteriores al orfanato. Estos restos, incluidas las estructuras de servicio, sugieren que no se trataba de un complejo residencial sino de una zona de procesamiento.