Ponte Nuovo

En 1333, al concluir el período de las guerras que llevaron los señores de Milán a conquistar finalmente Monza, Azzone Visconti hizo construir un perímetro amurallado de unos tres kilómetros destinados a proteger el núcleo central del burgo medioval. La murallas se unían al Sur cerca del gran Castillo de Visconti, del cual queda solamente la "Torretta" visible desde Via Visconti; en el lado oriental, a mayor protección, se excavó una desviación artificial del "Lambro", el "Lambretto". El fosado empieza exactamente en el punto donde se construyó el "Ponte Nuovo" de piedra, hoy el más antiguo puente percorrible que existe en la ciudad. Desde el puente se puede ver la base de las murallas medievales demolidas en el siglo XIX.